Imagen creada con la herramienta DALL-E de OpenAI.
Os dejo un poema megalómano que no debe ser muy bueno porque ha sido ya rechazado en certámenes. Pero siendo este mi blog, ahí va.
De cabeza a pies, detrás y delante
quiero ser el óvalo que se encumbra,
un rayo que no cesa en la penumbra,
dos caras de un espejo bien brillante.
En cada puerto quiero, por amante,
un poeta de noche al que deslumbra
otro rostro que en el mío vislumbra
efluvios dulces del amor mediante.
Quiero que en mi esplendor y en mi declive
me sigáis todos como la marea,
o como el perro que al amo recibe.
Que no haya en mí ninguna cara fea,
un fulgor añil que por siempre vive,
eso quiero cuando la luna sea.

0 comments:
Publicar un comentario